Las fases del alzhéimer
La enfermedad de Alzheimer no es simplemente una parte del proceso normal de envejecimiento: se produce por un estado morboso del cerebro.
El alzhéimer se caracteriza por la pérdida neuronal y la pérdida de conexiones entre neuronas. Además, se producen depósitos de proteína amiloide en forma de placas seniles y neuríticas y se forman en las neuronas ovillos neurofibrilares que contienen proteína tau hiperfosforilada.
Los cambios patológicos de la enfermedad se desarrollan lentamente a lo largo de años. Comienzan en las redes neuronales involucradas en los procesos de la memoria y se extienden a distintas zonas de la corteza cerebral. Clínicamente este proceso lento se ha clasificado en tres fases:
Fase pre-clínica: Hay cambios patológicos incipientes en el cerebro que no dan síntomas.
Fase pre-demencia o prodrómica: Aparecen los primeros fallos de memoria y otras funciones cognitivas, pero la persona conserva su autonomía de funcionamiento en la vida diaria.
Fase de demencia: El deterioro cognitivo es tal que produce dependencia y la persona no puede desenvolverse de forma autónoma. Esta fase de demencia transcurre también en tres fases: leve, moderada y avanzada, según el grado de dependencia.